Precioso y evocador este haiku. Tanto que me he atrevido (u osado) a componer uno en japonés al hilo de este, con la ayuda de Sumire, mi profesora de japonés. Gracias, Sumire, y gracias, Evelio.
Hiruma mo Iyuu
anata no namae wo
yoru no hi wa
Aproximadamente:
También de día
ella dice tu nombre
sol de la noche.
Sol de la noche:
ella, dormida y blanca,
dice tu nombre.
(Juan José Domenchina, 1989-1959).
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Precioso y evocador este haiku. Tanto que me he atrevido (u osado) a componer uno en japonés al hilo de este, con la ayuda de Sumire, mi profesora de japonés. Gracias, Sumire, y gracias, Evelio.
Hiruma mo Iyuu
anata no namae wo
yoru no hi wa
Aproximadamente:
También de día
ella dice tu nombre
sol de la noche.
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Karma: Tras el mandala, / en un tapiz oculto / juega la trama.
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